LO UNO LO MULTIPLE Y LOS PRINCIPIOS RIZOMÁTICOS

En diversos campos de actuación lo importante no es preguntarse o indagar que quiere tal cosa, que significa, buscar una interpretación que busque su significado oculto sino como funciona, cuales son las intensidades que permite pasar, que fuerzas lo atraviesan, en que agenciamientos se encuentra implicado.

No hay nada que comprender como significación preestablecida sino interrumpir los significados socializados, generar rupturas de sentidos, experimentar devenires otros, poner el cuerpo, afectarse.

Lo que esta en juego es la lucha política fundamental entre el uno y lo múltiple, la tensión escenificada entre 1) el orden de la unidad, ligada al árbol-raíz, como punto histórico referencial, donde se construye el mito del origen, de una causa primera, donde todo se inicia e instituye la estructura sociopolítica particular con sus propias leyes de funcionamiento y 2) el de la multiplicidad, de código abierto, rizomático, que desorganiza el orden patriarcal.

Nos encontramos por todos lados con la composición jerárquica de la representación del amo que encarna la unidad, el uno del ser, de este modo las multiplicidades que se agitan en los fondos del averno, son fagocitadas por el orden estructural que, en su luminosidad, reduce todo a las leyes de sus estructuras combinatorias según su lógica imperial.

La multiplicidad circula por fuera del reino del uno, su ser no es la esencia sino el devenir diverso, el ser no es, deviene, en realidad el ser es múltiple en sí mismo, por lo tanto la concepción del ser es una ficción necesaria, se constituye como una abstracción estática.

Desde esta perspectiva diferenciamos 1) el cosmos-significante-unario conservador 2) del caosmos-rizomático-asignificante, sub-versivo

Lo múltiple está en todos lados, pero no está disponible, no lo vemos porque estamos educados para pensar en categorías, en fraccionar el mundo, por lo tanto tenemos que permitir que emerja lo múltiple en nosotros, hacerlo brotar, forzar su emergencia, en el reino de lo múltiple el uno es un elemento más, des-jerarquizado, n-1, es un operador simbólico.

Un principio rizomático esencial es el de la conexión de los elementos en múltiples ligaduras donde un punto puede conectar don diversos puntos sin un orden preestablecido, sin puntos de fijación que direccionen los flujos, ni una referencia central que organice el conjunto (ej el Estado en las sociedades)

Otra característica del rizoma es la heterogeneidad que se abre a una composición diferente, no homogénea, que escapa a la sintaxis lenguajera, por lo que el método rizomático tiene como función la descentralización del lenguaje, su deconstrucción, hacia un universo semiótico múltiple no centralizado en unidades lingüísticas articuladas.

Otro principio rizomático es la multiplicidad, lo múltiple ya no como adjetivo ni cualidad predicativa sino como sustantivo, con todo su peso ontológico, la referencia ya no es el uno sino la propia multiplicidad en su inmanencia.

La unidad implica identidad, con sus clasificaciones, exclusiones, pero la multiplicidad no tiene ni sujeto ni objeto, sino dimensiones con su propio régimen diferencial no binario, en el rizoma no hay puntos o posiciones como lugares prefijados en un orden estructural, sino que se compone de líneas en su devenir multiforme.

La unidad en la multiplicidad se produce cuando lo múltiple es capturado por el poder del significante en su red estructurada y cuando ingresa en un proceso de subjetivización, por esta razón las multiplicidades son asigniticantes y asubjetivas

Otro principio es el de ruptura asignificante que devela sus formas plásticas antiestructurales que al recibir un corte, recomienza, se vuelve a reproducir (ej una papa que se la corta en pedazos y afloran raicilas en cada parte cortada), se interrumpe y se reconstituye en su devenir animal etc (ej hormigas en su dinámica rizomática)

El rizoma está compuesto de 1) líneasestructuradas, estratificadas, segmentadas que conservan un orden territorializado y 2) líneas de desterritorialización como punto de fuga que no permite que se consolide una organización, se cristalice una forma, se fije un movimiento. El pensamiento imaginario puede caer en el error de considerar que el rizoma es solo devenir desterritorializado permanente pero no es así tiene su organización, sus detenciones, direcciones, pero con prevalencia de lo fluido, del devenir, es decir que el rizoma es un compuesto de líneas estructuradas en una organización y puntos de fuga desestructurados, en un movimiento dialéctico que se abre a la novedad.

Otro principio rizomático es el de la cartografía, que abre espacios de devenires múltiples, es abrirse a la aventura de trazos sobre el mapa, inventando nuevos recorridos que pueden agenciar diversas travesías a través de senderos alternativos a la ruta principal señalizada.

El mapa es más afín al rizoma y se opone al calco que es del orden de lo mismo y la lógica de la reproducción. El calco es entonces es anti-mapa, no le interesa la novedad, lo creativo sino la repetición de la mismidad, en cambio el mapa evita la representación arbórea que sobrecodifica, está más del lado de la descodificación de los devenires.

Hacer mapa y no calco abre a la experimentación para no repetir lo dado, experiencia situada, de un compromiso con lo real en que se encuentra inmerso

El calco repite las formas que le marcan el modelo que se constituye como referencia a seguir, limita la producción deseante, bloquea la multiplicidad, esclerosa el movimiento.

Cartografiar abre senderos no estructurados, puntos y líneas más próximas al propio deseo y la potencia de las fuerzas activas, inconscientes.

El orden social, político, cultural presenta una organización, estratificada, arbórea, centralizada en el estado con sus ramificaciones institucionales, que busca imponer el calco, la reproducción de lo mismo, induce a conductas conservadoras, complementarias, que avalen el sistema sociopolítico en el poder.

La lógica del árbol-raíz, plantea un sistema jerarquizado, vertical, centralizado a partir de una unidad de mando, del amo encarnado y su sistema burocrático de gestión que maneja la maquinaria del poder y la dictadura del significante, esto es lo que hay que combatir a partir de una micropolítica de lo múltiple, de los devenires rizomáticos.

La seguimos en la próxima entrega

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